Este tipo de intervención puede hacerse en el parpado superior, en el parpado inferior o en ambos.
La blefaroplastia en el parpado superior tiene como objetivo eliminar el exceso de piel que haya en el parpado y en ocasiones parte del músculo orbicular subyacente. Las incisiones siempre se realizan en los pliegues naturales del parpado evitando así dejar cicatrices visibles.
En la blefaroplastia en el parpado inferior hay que diferenciar entre tratamiento de “bolsas” y tratamiento de “laxitud” y arrugas en la piel. El tratamiento de las bolsas consiste en reducir las mismas y/o recolocarlas. Este tratamiento puede realizarse por vía externa (incisión en la piel) o vía interna (vía transconjuntival). Las ventajas de la vía interna son ausencia de cicatrices, mayor seguridad y una recuperación más rápida. Para el tratamiento de laxitud se emplean otras técnicas como puede ser peeling, técnicas de tensado de la piel (cantopexia) o un resurfacing de la piel con láser.
De modo genérico lo que se suele hacer es una eliminación del exceso de piel, extirpación de las bolsas de grasas y estiramiento del parpado dejando de esta forma una expresión rejuvenecida.
Para este tipo de técnicas se utiliza anestesia local más sedación. Se procederá por tanto a anestesiar la zona alrededor del ojo y se acompañará de sedantes para la tranquilidad del paciente, quien permanecerá despierto.
Los riesgos que se asocian a este tipo de intervenciones son mínimos, aunque como en toda cirugía pueden producirse complicaciones.
Algunas de las complicaciones más usuales suelen ser: hematomas, conjuntivitis, visión doble, problemas con la cicatrización u ojo seco.
La duración de esta técnica quirúrgica puede variar dependiendo de la complejidad de la intervención, pero suele estar en torno a 1 o 2 horas. Si la cirugía se acompaña de otro procedimiento o intervención, el tiempo puede aumentar.
El postoperatorio no es doloroso, pero sí muy aparatoso. Tras la intervención se inflaman los párpados, es usual que salgan hematomas y esto unido a que utilizamos unas tiras de papel sobre los párpados, provoca que la apariencia muy llamativa.
Se pueden dar pequeños paseos, e incluso realizar un trabajo tipo oficina a partir de las 48 horas, pero recordando la apariencia llamativa sin las gafas de sol. Normalmente la paciente puede marcharse a casa horas más tarde de la intervención, aunque en ocasiones es imprescindible el ingreso durante 24 horas. El postoperatorio para este tipo de intervenciones suele ser poco doloroso, aunque a muchas personas le puede resultar bastante incómodo. Los posibles dolores serán tratados mediante analgésicos prescritos.
A partir de la semana se retiran los puntos, los párpados permanecerán inflamados, pero su apariencia estará normalizada, si bien, nuestros familiares y amigos pueden notar que los párpados están inflamados. Es normal, que permanezca algún hematoma que requiera de maquillaje para camuflarlo.
A partir de la segunda semana, la apariencia será normal incluso para familiares y amigos, aunque algún hematoma podrá persistir. Aunque los demás nos vean bien, la inflamación persistirá durante algunas semanas más. Habrá días en lo que estén los párpados más inflamados y otros en los que estén menos inflamados.
Desaconsejo aplicar cualquier crema cicatrizante en los párpados, la mayoría irrita los ojos, aunque existen algunas ex profeso, la cicatrización de los párpados superior es excelente en la inmensa mayoría de los casos.
Sí que aconsejo aplicar crema solar con color en los hematomas de los párpados inferiores, si aparecen, guardando una distancia mínima de 1 cm con el ojo.
Es recomendable que el paciente se aplique frio sobre la zona intervenida, así como pomadas o colirios y mantener la cabeza alzada durante los primeros días. No es recomendable exponerse al sol durante el primer mes, tampoco maquillarlos ni aplicación de rímel u otros productos. Es imprescindible llevar gafas de sol durante los primeros días.
Los resultados obtenidos por nuestros pacientes son satisfactorios y suelen durar bastantes años. Las cicatrices serán apreciables los primeros días, aunque irán difuminándose ya que están hechas en los pliegues naturales de los parpados evitando así poder ser vistas.
En poco tiempo la persona tendrá una mirada rejuvenecida y libre de signos de cansancio.
Los cuidados inmediatos más importantes son:
– limitar la actividad física;
– evitar agachar la cabeza (cuidado al ponerse los zapatos);
– dormir con el cabecero elevado;
– aplicar compresas de agua fría en los ojo.
Tras la operación al paciente se le aplicará una pomada para lubricar la zona intervenida y un colirio. En ningún momento se procede al vendaje de los ojos. El cirujano prescribirá realizar una serie de masajes de drenajes linfáticos de forma opcional.
Normalmente, el paciente puede marcharse a casa horas más tarde de la intervención, aunque, en ocasiones, es imprescindible el ingreso durante 12 horas. El postoperatorio para este tipo de intervenciones suele ser poco doloroso, aunque a muchas personas les puede resultar bastante incómodo. Los posibles dolores serán tratados mediante analgésicos prescritos.
Es recomendable que el paciente se aplique frio sobre la zona intervenida, así como pomadas o colirios y mantener la cabeza alzada durante los primeros días.
No es recomendable exponerse al sol durante el primer mes, tampoco maquillarlos ni aplicación de rímel u otros productos. Es imprescindible llevar gafas de sol durante los primeros días.